martes, 29 de noviembre de 2016

Tocaron el cielo con las manos, campeones


Este martes sucedió uno de los hechos más tristes con el fútbol internacional; el avión que trasladaba a Chapecoense se estrelló y dejó nada más que seis sobrevivientes, tres de ellos eran futbolistas.


Un equipo humilde que soñaba tocar el cielo con las manos, luego de haber logrado la final de la Copa Sudamericana dejando en el camino a Independiente y San Lorenzo, quien se asomaba como el gran candidato. Consiguió el tanto de visitante y en Brasil, en su tierra se hizo fuerte para conseguir la clasificación. Si bien el Ciclón pudo eliminarlo en la última pelota del partido por medio de Angeleri, pero Danilo puso el pie y sacó la pelota para todo el festejo del hincha, de los jugadores y cuerpo técnico ya que lograban algo histórico para la institución… estaban escribiendo una historia aparte del libro. Iban a jugar la final de una Copa internacional. ¿El rival? Atlético Nacional.

El plantel estaba en pleno vuelo a Colombia, donde este miércoles iba a jugar el encuentro de ida del certamen. Sin embargo, en la madrugada del martes 29 de noviembre la tragedia misma ocurrió: el avión estrelló y dejó un saldo de 71 muertos. Solamente tres jugadores sobrevivieron. Danilo, arquero titular, había sido rescatado con vida, pero falleció en el hospital tras despedirse de su familia.

Rápidamente, todo el mundo del fútbol se solidarizó con el equipo brasileño: los grandes equipos de Europa como argentinos, y otros países hicieron  minutos de silencios en Boca, River, Real Madrid, Barcelona y más equipos antes del entrenamiento. Además, el conjunto colombiano solicitó a la Conmebol que la Copa Sudamericana se la otorguen a Chapecoense como homenaje.

                                

El Anfield también los homenajeó con un minuto de silencio que hizo soltar las lágrimas de más de uno. Y no, no todos conocían a este humilde equipo, que en el 2009 jugaba la cuarta división y tres años después ascendieron a la tercera categoría para que dos años más tarde consiguieran el objetivo y anhelo de jugar en la primera división del fútbol brasilero.





Este 2016 escribieron un capítulo aparte en la historia del club, lograron la clasificación a la final de la Copa Sudamericana. Hoy, los recordamos festejando en el vestuario, saltando y cantando por adjudicarse semejante logró… No nos despedimos de ustedes, porque ustedes siguieron subiendo y se fueron a tocar el cielo con las manos, campeones. ¡Todos somos Chapecoense! 


Así los recuerda la página oficial de Chapecoense







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