Ph: CABB
La Selección argentina de básquet masculino aplastó 104
a 58 a Islas Vírgenes en el último duelo del grupo en la Americup, que se
disputa en Bahía Blanca, y en el cuadrangular se medirá ante México el próximo sábado desde las 21 en el Orfeo Superdomo de Córdoba.
Luego de las victorias ante Venezuela y Canadá en el
tiempo suplementario, el combinado nacional quería seguir por la misma senda y
lo ratificó esta noche en el último encuentro del grupo B tras vapulear a Islas
Vírgenes con unidades de diferencia.
En el primer tiempo, el elenco albiceleste dominó el
cotejo de punta a punta con un gran rendimiento colectivo, donde alcanzó cerrar
el primer cuarto con 11 puntos de ventaja (20 a 9) y una primera etapa con una
diferencia de 21 (48-27).
Vídeo: FIBA
Sin embargo, la segunda parte no cambió en mucho, ya
que el seleccionado argentino se mostró confiado y tranquilo para ser el dueño
del match; ratificó su buen momento y aprovechó las falencias que demostró el
rival, pese al buen rendimiento que había mostrado en los primeros dos
partidos.
La mala noticia que opaco la victoria es la lesión de
Gabriel Deck tras una caída y minutos después se confirmó que sufrió un
esguince en su tobillo derecho y se le seguirán haciendo estudios.
Los dirigidos por Sergio Hernández continuaron
castigando, pero ya rotando el equipo, dándole descanso a los que ya sentían el
desgaste y alcanzó para sacar 46 puntos de ventaja (104-58). Luciano Redivo se
lució con sus triples y fue máximo artillero con 19 unidades, mientas que J.
Simmons con 13 fue el goleador de Islas Vírgenes.
“Estos equipos son peligroso, que si lo haces crecer
es difícil darlo vuelta. Tenemos que arrancar duro desde el inicio e hicimos un
grandísimo trabajo”, comentó Campazzo en dialogó con Tyc Sports.
“Estamos en camino en encontrar la identidad, buscamos
esa actitud e intensidad; nosotros no hablamos de salir campeones, vamos paso a
paso, queremos conocernos más”, añadió el base.
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