Ph: EFE
Un día como hoy, pero hace tres años atrás,
Alemania le daba una paliza futbolística al equipo que dirigía Luiz
Felipe Scolari en el mundial organizado en Brasil: fue ¡7 a 1! para el elenco
europeo, que dejó en ridículo al anfitrión.
Pasaron tres años de aquella
semifinal donde los locales se enfrentaron al conjunto que dirige actualmente
Joachim Löw. Los de Verdeamarela llegaban al encuentro sin su gran figura Neymar,
quien había sufrido una lesión frente a Colombia que lo dejó marginado para dicho
encuentro. En cambio, los alemanes dejaron en el camino a Francia en la fase
anterior y era uno de los candidatos a levantar la Copa del Mundo junto a
Argentina, que eliminó a Holanda desde la tanda de penales.
Pero nadie creía que la diferencia
iba a ser abismal, porque a los diez minutos Thomas Müller abría el marcador y la catarata de goles no iban a tardar de
caer, ya que después de los 20 llegaron cuatro tantos en seis minutos: Klose
amplío la diferencia y luego un doblete de Toni Kross y otro de Khedira para
hacer llorar a todos los brasileños presentes en el estadio y los que estaban
afuera también; ya era una goleada inesperada: ¡5-0! antes de los primeros 45
minutos.
En el complemento, Andre
Schurrle, con un doblete, concretó séptimo del cotejo, que iba a
tener un tanto más por parte de Óscar, que cerró con el gol del honor.
Pasarán
los años y esté será uno de los encuentros que seguirán latente por la manera,
por la cantidad y por lo que significó para los locales, quienes después se
vistieron de alemanes en la final contra el conjunto argentino.
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