Con 51 goles y 32 asistencias bajo el brazo en este año, y con un nivel estelar Leonel Andrés Messi llegó ayer a tierras brasileñas, más precisamente al predio del Atlético Minero en Ciudad do Galo. Con su rubio opacado por su color natural y con un nuevo tatuaje en esa exquisita zurda, el 10 arriba como el salvador de esta albiceleste que hace tres encuentros que no gana y que, en estos momentos, se encuentra fuera del mundial de Rusia 2018.
Por causalidad más que casualidad la Argentina sólo obtuvo dos puntos de los últimos nueve disputados justamente cuando el astro del Barcelona no pudo calzarse la celeste y blanca debido a una lesión en su pierna. Es por eso que ante Brasil el pueblo argentino más que nunca se aferra al Mesías.
Sin embargo, por cuestiones obvias de este deporte colectivo, es que este crucial encuentro no sólo se definirá desde cómo se levante Lio, sino que también, desde cómo se encuentren los restantes 10 jugadores. Sin cambios rotundos teniendo en cuenta la derrota ante Paraguay por 1 a 0 en Córdoba, Edgardo Bauza, sin mediar alguna sorpresa, dispondrá en cancha a: Sergio Romero; Pablo Zabaleta, Nicolás Otamendi, Ramiro Funes Mori, Emmanuel Mas; Enzo Pérez, Lucas Biglia, Javier Mascherano, Ángel Di María; Lionel Messi y Gonzalo Higuaín.
El cambio de esquema de un 4-3-3 o un 4-2-4 dependiendo las situaciones del juego, al 4-4-2 fue lo más destacado en lo que se refiere a la formación, y si se es más minucioso la inclusión del volante del Valencia por la derecha. A priori, el dt buscará ser más equilibrado, ganar la mitad de cancha y atacar por las bandas con Fideo y Pérez a quienes se le sumará nada más y nada menos que Messi para desequilibrar en los últimos 20 metros.
Con cuatro victorias la hilo, puntera, con un juego pregonado por Tite más cercano a la rica historia verdeamarela y con un Neymar y Gabriel Jesús en un nivel altísimo, Brasil llega a este choque con la confianza por las nubes. Sin embargo, ellos saben que en frente no sólo tienen a su máximo rival sino que, también, tienen en contra a uno de los más grandes de todos los tiempos, que con una jugada suya puede resolver el encuentro, y que nosotros en él creemos.
No hay comentarios :
Publicar un comentario