El 7 de noviembre no sólo es el
día de los canillitas y el de los periodistas deportivos, sino que también hace
43 años nacía el máximo goleador en la historia de Boca Juniors, y uno de sus
más grandes ídolos, Martin Palermo.
El “Titán” nació en La Plata y es hincha confeso de
Estudiantes, donde debutó como jugador. Pero el club al que le dio todas las
satisfacciones y alegrías, y al que hizo emocionar incasables veces fue Boca.
Desde cabezazos de mitad de cancha, colgado del travesaño,
en medio de la niebla: 236 fueron los goles que marcó con la azul y oro en competencias oficiales, locales e
internacionales, número que nadie
alcanzó, y a los quizás nadie llegará.
Comenzó en la Primera Division siendo jugador del
Pincharrata en 1992. Club en donde tuvo varios altibajos, pero pudo dar sus
primeros pasos y crecer para convertirse en el jugador tan recordado que es
hoy. “¿Vos querés buscarle la explicación a Martín Palermo? No se la
busqués. Ni por gil, ni por los goles, ni por la técnica, ni por todo lo que
evolucionó como jugador. Buscásela en la mente y en el alma, buscásela en el
corazón, buscásela en la familia”,
afirmó “El Profe” Daniel Córdoba cuando se le había preguntado en aquella
época. Llegó a jugar con figuras como Juan Sebastián Verón y José Luis Calderón.
El Loco también fue a parar al fútbol europeo desde el 2001
al 2004, pasando por clubes como el Villarreal, el Real Betis y el Alavés. Estuvo
bien encaminado al comienzo, pero tras sufrir una doble fractura de tibia y
peroné, su nivel decayó. En total, 26 fueron los goles convertidos en su paso
por Europa.
Y como olvidar su pasó por la Selección Argentina errando 3
penales en un partido, o haciendo el gol de clasificación al Mundial bajo un
diluvio. Sin embargo, sin pensarlo, su momento más destacado fue el partido
contra Grecia en el Mundial de Sudáfrica 2010, donde marcó un gol a los 89
minutos y selló el 2-0, rompiendo una racha de 80 años sin que un jugador de
Boca Juniors pudiese convertir para Argentina en una Copa del Mundo. A su vez, Con esa conquista se convirtió en el mundialista
argentino más longevo en marcar un gol con 36 años.
Como excusa de su cumpleaños, acá los 3 goles más
emocionantes del Titán:
Gol frente a Perú en el último minuto
Gol de mitad de cancha a Independiente
Gol a River en la Copa Libertadores '00
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