Objetivo Río 2016

Eduardo Gallardo, entrenador de la selección masculina de handball, comentó sobre el tercer puesto obtenido en el Panamericano, se ilusionó sobre la llegada de los Juegos Olímpicos de Río, se mostró optimista sobre la clasificación al Mundial de Francia 2017 y opinó acerca de las nuevas camadas de jugadores y el futuro del deporte en Argentina.

- ¿Qué te dejó haber logrado el tercer puesto en el Panamericano?

- La verdad que nos dejó una sensación amarga porque nosotros buscábamos el título. Lo único que rescato es la clasificación al Mundial, pero no estamos contentos con el resultado final del torneo. Queríamos el tetra claramente, quedamos afuera de una final luego de 10 años.

- ¿A qué rival considerabas la mayor amenaza?

- Chile era complicado, más allá de que esté un escalón por abajo nuestro. Brasil era el otro que me preocupaba.

- ¿Cómo viste al equipo en general y qué pensás que les jugó en contra?

- Quizás al principio no tuvimos problema porque los equipos eran más flojos, pero a medida que vas avanzando uno se cruza con selecciones de mayor calibre. Necesitás que tenga rodaje el equipo. Imaginate que nosotros juntamos a los jugadores tres días antes que empiece el torneo y muchos llegaron lesionados, no pudimos ensamblarnos bien. El rendimiento fue más que nada de menor a mayor igualmente. Y quizás el peor momento lo tuvimos con Groenlandia, más allá de que el arbitraje fue malísimo. Por otra parte, ante Chile tuvimos un muy buen primer tiempo y en el segundo nos quedamos un poco. Creo que se debió a falta de definición y no a otra cosa. En cuanto a Brasil, jugamos bien, pero tuvimos un par de errores y se sumó la lesión de Sebastián Simonet. Por último, frente a Uruguay (que es bastante inferior a nosotros) jugamos con mucha contundencia.

- ¿Se sintió mucho la falta de Diego Simonet?

- La falta de Diego se siente porque el equipo sin él es diferente. Además, Gonzalo Carou llegó justo al partido con Chile, Fede Vieyra estuvo un mes y medio sin actividad porque se había fracturado la mano, Juampi (Fernández) estuvo afuera, Seba Simonet no jugó en el segundo tiempo contra Brasil por la lesión, Agustín Vidal venía también de lesiones. Llegaron, nos juntamos y no tuvimos tiempo para mucho más que eso.

- ¿Cómo pensás suplir su ausencia en Río?

- Todos los demás ya van a estar bien, se puede suplir. No te voy a decir que es lo mismo si está Diego a si no está, pero el equipo puede andar bien. Sin ser lo mismo, nos armaremos diferente.

- Ahora que ya consiguieron la clasificación al Mundial de enero, imagino que estás con la cabeza en Río…

- ¡El objetivo es Río! Tenemos la preparación acá, el jueves de la semana que viene largamos de nuevo. Viene Egipto a jugar el 27 y 29 de julio, calculo que serán en Buenos Aires ambos partidos. El 1 de agosto nos vamos, el 4 enfrentamos a Suecia y ya el 7 comenzamos con todo.

- ¿Cómo ves la zona de los JJOO?

- Los Juegos Olímpicos son lo más difícil de todo porque no hay ningún rival sencillo o accesible. Hay 12 equipos nada más, que van siempre los mejores del mundo. En mi opinión personal, me hubiese gustado más estar en la zona que le tocó a Brasil. Igualmente son todos complicados, no es que hay uno o dos que sabés que podés relajarte. Son los Juegos Olímpicos después de todo. 

- ¿Le diste alguna sugerencia a Eduardo Peruchena y a las chicas siendo estos su primeros Juegos Olímpicos?

- Sí, nos han preguntado tanto Eduardo como las chicas. La experiencia del Juego Olímpico es fantástica y te sorprende todo. Por todas las vivencias, más allá de lo deportivo. A nosotros también nos habían contado, pero vivirlo en carne propia es muy diferente. Les dijimos que tomen recaudos, pero eso se dará en cuanto a la forma de cada uno.

- Pasando al Mundial, ¿Qué buscás conseguir?

- Recién con la zona sorteada uno puede ir viendo a lo que aspirar. Lo que si queremos es mantener el nivel con el que jugamos en Catar en 2015, que fue muy alto. Eso y con una zona, quizás no la de la muerte como en el anterior, o cruces menos peleados para poder escalar más alto. El tema pasa también por como lleguen los jugadores. Estando todos bien pasamos de ronda, empatamos con el subcampeón del mundo (Dinamarca), le ganamos a Rusia a Arabia Saudita y le jugamos parejo a Alemania y Polonia.

- Argentina ya está sentada en la mesa de los grandes, pero ¿Qué falta para seguir subiendo escalones?

- Yo creo que con este equipo podemos aspirar a uno o dos escaloncitos más, llegar a los 10 mejores u 8 mejores tal vez. El tema es que la estructura del deporte en Argentina es totalmente amateur y los chicos se van formando de esa forma. Pero cuando vas a competir a otro nivel vienen con otra formación. A mi parecer, el deporte debería pasar a ser profesional, pero que no sólo cobren los jugadores de arriba, sino que la estructura sea más profesional en sí. Que los entrenadores estén bien formados, y que tanto ellos como los jóvenes puedan vivir del deporte.

- ¿Cómo ves a la Selección de ahora?

- Esta Selección, salvo por algún que otro jugador, tiene un ciclo olímpico más (Tokio 2020). Son jóvenes de entre 26 y 30 años, la base del equipo va a llegar sin ningún problema.

- Por último, ¿Cómo ves a la nueva camada de jugadores y al futuro del handball en Argentina?

- Hay chicos interesantes, ya he subido a algunos juniors a la Selección Mayor y los hicimos trabajar con nosotros. El tema es darles competencia. Porque si vos tenés una buena Selección Juvenil, pero no tiene desafíos a nivel internacional es muy difícil que crezca. Y en cuanto al deporte, pienso que la Confederación ha hecho un trabajo fantástico. Hay torneos desde infantiles, a nivel nacional de clubes, hasta de federaciones regionales. El tema fundamental va a ser mejorar la estructura deportiva. También creció muchísimo la cantidad y, lo más importante, la calidad de los jugadores que están hoy jugando al handball.