Nick Kyrgios, 21° del ranking
mundial, enfrentará a Juan Martín Del Potro esta noche en el Luna Park, sin
embargo, en la antesala al encuentro se refirió a su personalidad y afirmó que
sabe que hizo cosas tontas, pero el jugador de tenis y la persona son dos
bestias diferentes.
El mítico estadio vivirá una noche de
gala para recibir a la Torre de Tandil y al talentoso australiano de 22 años
para disputar la Copa Peugeot. Pero antes de lo que sucederá esta noche en la
exhibición, Kyrgios dialogó con Clarín y dejó reflexiones para analizar.
“Nunca voy a dejar de pensar y tener
en cuenta lo afortunado que soy por hacer lo que hago. Pero también soy humano
y extraño mi casa, mis amigos y mi familia. Como cualquiera, después de
bastante tiempo viajando a veces te bajoneás, pero ser tenista es también una
bendición. ¿Si me frustro? Creo que algunas de mis acciones en las canchas lo
demuestran, pero soy solamente un ser humano”, describió el tenista.
Ante su actuación dentro de la
cancha, él señaló que “es capaz de ser un top 5” y que “puede ganar los torneos
más importantes”, pero afirmó que intenta disfrutar la vida y destacó que “estar
en la cima a veces te deja solo y ahora prefiere no estarlo, pero con el tiempo
estará listo”.
“Le he dado todo a este deporte, mi
vida entera, y creo que la recompensa ha sido generosa. Seguiré haciéndolo. Tal
vez alguien crea que lo que hago no es todo lo que debería; quizás lo es,
quizás no. Pero yo seguiré trabajando tan duro como pueda para cubrir mis expectativas
y no las de los demás”, prosiguió.
Ante la consulta sobre su vida
privada, donde opinan desde la prensa y el público, Kyrgios dijo: “Estoy de
acuerdo en un punto: mi vida profesional es pública y la gente tiene derecho a
opinar de mí como tenista. Pero hasta ahí llega, porque no me conocen como
persona y creo que no deberían atacarme o ser negativos con mi persona porque
mi vida personal es privada. Sé que he hecho algunas cosas tontas que los han
hecho creer que me conocen, pero el jugador de tenis y la persona son dos
"bestias" diferentes”.
“Algo que la gente no sabe de mí es
que siempre trabajé o dediqué tiempo a diferentes caridades. Tengo mi Fundación
y siempre fue un objetivo para mí. La gente se olvida de que yo no crecí en una
familia tenística tipo, en la que mami maneja una Range Rover y papá tiene un
Bentley. Mis papás trabajaron muchísimo y lucharon para ayudarme a llegar donde
estoy. No te digo que hayamos sido pobres, pero mi infancia estuvo más cerca de
eso que del estereotipo de familia rica que se dedica al tenis. Yo quiero que los
chicos que quieren jugar a un deporte, en cualquier estamento, y sientan que no
les pertenece por la situación económica de su familia, tengan un lugar para
sentirse felices, cuidados y satisfechos. Y usar eso como motor para mi carrera
creo que me dará una mayor motivación que jugar sólo para Nick Kyrgios”, agregó
el australiano de 22 años.
En referencia a la exhibición que se
jugará esta noche en el Luna Park, el finalista de Cincinnati habló sobre su
relación con Del Potro: “No hemos pasado demasiado tiempo juntos. De los
jugadores top, probablemente sea el único al que no conozco tanto como al
resto. Pero siempre fuimos muy respetuosos entre nosotros, nos saludamos y
todo. En realidad, ¿cómo podría ser de otro modo? Delpo es una
leyenda y un jugador que me encanta observar. Me gusta mucho verlo jugar y creo
que dentro de una cancha es capaz de cualquier cosa. No tiene límites. Y su derecha
es mortal”.
A su vez, el diestro creé que tiene
potencial para que el argentino sea número uno del mundo: “¿Por qué no? Es más
que suficientemente bueno. Tuvo constancia este año y salud. Y para alguien con
su talento eso es clave, porque si está bien puede ganarle a cualquiera en
cualquier momento”.
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