Boca y Central son la
esperanza argentina para esta Libertadores. Una copa que en los últimos dos
años ha sido levantada por conjuntos nacionales: San Lorenzo y River.
Sin demasiadas sorpresas, el
“Xeneize”, seis veces campeón de América, ha ganado su grupo y desde ese
momento no se puede sacar la “pasta” de candidato. Luego de derrotar a
Cerro Porteño en los octavos por un global de 5-2, los dirigidos por Guillermo
y Gustavo Barros Schelotto jugarán este jueves el partido de ida de los cuartos
de final ante Nacional en Uruguay. Un cruce que por historia parece complicado,
y en donde los charrúas corren con ventaja 3-2. La vuelta será el jueves 19 en
la mística Bombonera.
Por otra parte, aparece un equipo del interior
que ya hace bastante tiempo es sensación en el fútbol argentino: el Central de
Eduardo Coudet. A pesar de que “La Academia” del “Chacho” no ganó ningún
título, el año pasado no sólo peleó hasta la definición del torneo local sino
que también llegó hasta la final de la Copa Argentina; duelo que perdió
polémicamente ante Boca. Este equipo rosarino, además de ganar su grupo, en los
octavos de final triunfó en los dos partidos ante Gremio con un global de 4-0.
Eso sí, el “Canalla” no lo tendrá sencillo, ya que se cruzará ante el temido
Atlético Nacional de Colombia, quien es el número 1 de esta competencia. El
partido de ida será este jueves en Rosario y el 19 será la vuelta en Medellín.
Los otros cruces de cuartos
serán: Independiente del Valle (ECU) ante UNAM (MEX) y el duelo brasileño entre
San Pablo y Atlético Mineiro. Dos equipos argentinos son la esperanza en la
Copa, dos equipos que en el plano local ya no juegan por nada, arriesgan todo
en el internacional.
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